Fueron poemas

domingo, 22 de octubre de 2023

Amigos

Muy a menudo te recuerdo, amigo, ahora que ya no estás.
Recuerdo tus palabras como milagros en mi alma si la tuve.
También los lados oscuros que todos tenemos.
Recuerdo las risas como un maravilloso virus contagioso.
También esos sueños que teníamos y que no venían nunca.
Bueno, quizá sí, cada día al acostarnos, y nos los contábamos de vez en cuando para que vivieran más allá de cada nostalgia.
Me ayudaste a construirme y no lo olvidaré nunca...
Tampoco olvidaré cada día y cada hora que fuiste como la chimenea que vendrá este invierno y abrazará la piel, los sentidos, los miedos y la incertidumbre, dándome cobijo, como un faro en el horizonte en plena marejada.
No hay nada como navegar la vida con la sensación de estar seguro, seguro de que sólo algunos ojos te mirarán, entre todas esas olas salvajes, ayudándote a llegar a tu destino.
A esos, mis queridos amigos, que parece ya no están pero están sin duda alguna.
Seguís siendo, pese a todo, parte de lo que fui y lo que soy.
El escalón necesario donde apoyarme, para poder subir el siguiente, y el siguiente también...
Hasta dónde, no lo sé. Pero gracias, muchas gracias.
Desde mi alma a tu alma.